A la hora de hablar de páramos en Colombia, el más reconocido es tal vez el Páramo Santurbán. Destacado por la diversidad y belleza de su fauna y su flora, se encuentra ubicado entre los departamentos de Santander y Norte de Santander. Como los demás páramos del país, Santurbán compone un ecosistema complejo cuya riqueza hídrica lo convierte en hogar de múltiples especies de fauna y flora y en uno de los principales abastecedores de agua de las poblaciones y ciudades cercanas.
Extensión | Temperatura | Altura | Departamento(s) | Ciudad más cercana |
|---|---|---|---|---|
142.610 ha | Hasta 3°C | 4290 msnm. | Norte de Santander | Bucaramanga |
Ríos, riachuelos y quebradas se encuentran dentro del Páramo de Santurbán, que es conocido también como “Nudo de Santurbán” y cuya extensión aproximada es de 142.000 hectáreas, sobrepasada por poco por el Páramo de Sumapaz, cuya extensión es de 178.000.
En plena Cordillera Oriental de los Andes Colombianos, y conectado con algunos páramos más, el páramo Santurbán es una de las principales fábricas de agua del país; es un ecosistema indispensable para la existencia de todas las formas de vida pues no solamente es el nacimiento de múltiples fuentes de agua sino que cuenta además con una gran biodiversidad de plantas y animales.
Índice de contenido
La ubicación del páramo de Santurbán abarca varios municipios de Santander y Norte de Santander: California, Suratá, Tona, Charta y Vetas; es por eso que el camino más fácil para llegar es a través del municipio de Vetas, al que se llega tomando un bus desde Bucaramanga. Lo importante es tener en cuenta que la carretera es un poco difícil y que por lo mismo contratar un servicio de jeep es muchas veces la mejor opción.
Dentro del páramo hay varios Parques Naturales: el Parque Natural Salazar de las Palmas, Arboledas y Mutiscua – Pamplona. La altitud del páramo de Santurbán está entre los 3.000 y los 4.290 metros sobre el nivel del mar, lo que nos da a entender que cuenta con temperaturas bastante bajas, en donde la más alta es de 17 grados centígrados y la mínima de -15 grados centígrados, gracias a los vientos que llegan de la alta montaña que dan una sensación térmica mucho menor.
Es gracias a esto que los visitantes del páramo deben tener en cuenta el uso de abrigos gruesos, ojalá impermeables; botas o zapatos térmicos, protector solar, guantes y pasamontañas que funcionen como una buena protección térmica para el cuerpo.
A pesar de que los alrededores del páramo cuentan con una oferta gastronómica y turística atractiva, dentro de los parques naturales del Páramo de Santurbán no hay un lugar dispuesto para el hospedaje y la hotelería.
Dentro de los parques, sin embargo, hay espacios adecuados para hacer camping, muy cerca del Páramo de Santurbán, que prometen contacto directo con la naturaleza, tranquilidad, aire puro y paisajes naturales.
Así es el páramo de Santurbán ¡A empacar el sleeping!
Recorrer el páramo nunca es una actividad solitaria. No importa qué tan pequeños sean los grupos de personas que accedan a planes turísticos para conocer la zona: los animales y las plantas del páramo de Santurbán siempre estarán ahí sirviendo de compañía.
El páramo y su clima frío se prestan para que 457 especies de plantas, 201 especies de aves, 17 especies de anfibios y reptiles y 58 especies de mamíferos nazcan y crezcan allí, abasteciéndose del agua y el alimento que el páramo les brinda.
Es común ver durante los recorridos al cóndor de los Andes y al águila de páramo sobrevolar el espacio, mientras el canto de gorriones, colibríes y ciotes musicalizan el andar de quienes visitan los parques del páramo. Ranas de cejas amarillas, lagartijas, conejos, pumas de páramo y hasta venados sobreviven dentro del páramo y se dejan ver de los más cuidadosos y respetuosos del medio ambiente.
Muchas de esas especies se encuentran en este momento en amenaza de extinción, por lo que el cuidado del páramo es una tarea no solamente de los visitantes sino también de quienes habitan cerca, quienes entran a cada parque natural con el compromiso de no alterar el ecosistema con ningún elemento externo, llevando consigo cualquier desecho y tratando de dejar el páramo como lo encontraron.
Son consideradas unas joyas para el ecosistema. Son plantas que cumplen con la función de mejorar el ecosistema, pues a través de sus hojas absorben la humedad de la neblina liberándola a través de sus raíces, permitiendo la circulación del agua hacia quebradas y ríos, y sirviendo como fuente de alimento para aves e insectos que habitan los páramos.
Dentro del páramo de Santurbán el frailejón es protagonista: marcando el camino de quienes lo recorren y rodeando las distintas lagunas y humedales del lugar, los frailejones crecen solamente entre uno y dos centímetros por año, lo que aumenta la importancia de cuidarlos y no tocarlos, pues se encuentran, además, en vía de extinción.
El agua y el páramo son compañeros inseparables. El uno no puede vivir sin el otro: son fuentes hídricas importantísimas para el país y su ecosistema de páramo funciona de una manera específica y organizada para poder abastecer ríos, quebradas y municipios cercanos.
El área del páramo es de unas 142.000 hectáreas, lo que significa una gran cantidad de agua para animales, plantas, y personas y que se ha convertido en objetivo de algunas empresas que quieren comenzar a desarrollar allí sus propios proyectos mineros con la intención de extraer oro, esto pone al páramo de Santurbán en peligro.
La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) es la encargada de evaluar las solicitudes realizadas por estas empresas de minería y deliberar de esta manera qué tan posibles, dañinas o responsables son estas peticiones a través de un estudio de impacto ambiental que arroja los resultados de las amenazas del páramo de Santurbán.
El debate es continuo y constante, pues, a pesar de que pueda llevarse a cabo una minería responsable, los defensores del medio ambiente sostienen que por más pequeña y responsable que sea la minería, su impacto ambiental sería nefasto, acabando con el agua y la biodiversidad del páramo de Santurbán.
Lo que buscan estos defensores es incentivar a quienes no conozcan los páramos para que los visiten y los cuiden, haciendo en ellos un turismo consciente y cuidadoso; promueven el páramo bajo la consigna “el agua es un tesoro mucho más valioso que el oro”, e invitan a los colombianos a unirse a las campañas de cuidado y protección que realizan.
Que se lleven a cabo proyectos mineros o no, es todavía un paso que está en veremos… pero, por si acaso, ¡hay que ir pronto a conocer el páramo de Santurbán!
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SERIA ESTUPIDO Y CATASTROFICO REALIZAR PROYECTOS MINEROS AL PIE DEL PARAMO, POR PEQUEÑO QUE SEA, PORQUE ELLO PRODUCE DAÑOS IRREVERSIBLES AL ECOSISTEMA. DEFENDAMOS A COMO DE LUGAR NUESTRAS RESERVAS HIDRICAS.